La narrativa previa al partido se ha centrado más en los árbitros que los jugadores. El Real Madrid emitió un comunicado ayer diciendo que tenían la intención de boicotear todas las obligaciones de los medios antes del empate debido al árbitro asignado, Ricardo de Burgos Bengoetxea, a quien insinuaron un sesgo contra ellos y favorecieron a Barcelona.
